24 de julio de 2009

Las redes sociales desde al Análisis de Redes Sociales

Enredado en las redes sociales, encontré magia. Según se afirma, Kevin Kelly “valoraba las dimensiones de la Red en cifras de este modo: 55 billones (millones de millones) de enlaces entre páginas; 100.000 millones de clics por día; 8 terabytes de tráfico por segundo (media biblioteca del Congreso de los EEUU, 17 millones de libros, pasando por la Red cada segundo); 1.000 millones de chips de PC conectados por Internet; 2 millones de correos electrónicos por segundo y 1 millón de mensajes instantáneos por segundo”. Todo esto –y más- es la gran maquinaria cognitiva que es hoy Internet, ya que en este no-lugar se ha potenciado de forma exponencial y en un tiempo muy breve tanto la interacción, relación entre personas a través de la máquina, y la conectividad, aquella relación persona máquina.

Esto es, conectividad e interacción no son lo mismo. Sobre la capacidad de conexión entre máquinas se sustenta la interacción en las redes sociales en Internet y es por ello que, sustancialmente, la actual dimensión de Internet pasa por estimar su capacidad para generar interacción social. Estar en la Red significa ser parte de una red de personas.

Por ello, es necesario profundizar en cómo se manifiesta esta dimensión social en nuestras acciones en y a través de las redes sociales, tipo Web 2.0. Esto no por el afán del conocimiento por el conocimiento –que ya lo justificaría-, sino porque acercarnos a estas nuevas redes sociales amplia la imagen de nosotros mismos y de nuestras relaciones, aquella con la que nos construimos y a la que nos debemos –nada menos- y que hoy extendemos de manera virtual, pero intensa.

Guiado por esta necesidad me vengo topando hace tiempo ya con el Análisis de Redes Sociales (ARS) –Social Network Analysis- que es una herramienta de investigación que puede ayudarnos a comprender no sólo la conectividad, sino la interacción en Internet, y así avanzar un poco más al mundo de los significados que tejemos en estas redes sociales.

En este sentido llamo la atención sobre el Vol. 16, Nº 2 de REDES - Revista hispana para el Análisis de Redes Sociales. Esta última edición monográfica,”Las relaciones: la sustancia de las redes sociales” coordinado por Claire Bidart, Michel Grossetti & Johanne Charbonneau, puede ser de espacial interés para quienes buscamos entender y caracterizar educativamente las relaciones en general y las relaciones mediadas tecnológicamente en particular. Analizar la interacción en y a través de la Web 2.0 desde la perspectiva del ARS añade una mirada diferente al tema que ya no es nueva... es otra forma de visualización y aprehensión de la dinámica de las redes.

En este monográfico los trabajos buscan hacer aportaciones sobre las relaciones, unidad base sobre la que se sostienen las redes sociales. A juicio de los coordinadores de este número, en estos estudios de ARS “a veces se realiza una caracterización mínima de las relaciones, pero sin considerar el contenido, el “motor”, ni la dinámica. Sin embargo estas cualidades de los lazos pueden ser determinantes… (Por ello) La dinámica de las redes sociales puede difícilmente ser comprendida sin tener en cuenta las historias de las relaciones: ¿cómo nacen? ¿cómo cobran autonomía de los contextos iniciales? ¿cómo se combinan o no unas con otras? ¿cómo se vuelven especializadas o polivalentes? ¿cómo desaparecen?”.



¿Qué puede esperar la educación y el e-learnig de esta forma de investigar la interacción? Por ejemplo, en un trabajo de Domínguez, que va por esta línea, se puede visualizar el panorama del siguiente modo: “Determinados comportamientos con escaso potencial formativo en situaciones off-line, demuestran ser decisivos para articular gran parte del conocimiento generado en un foro virtual. En nuestras observaciones hemos visto con frecuencia mensajes con un contenido irrelevante desde el punto de vista pedagógico que, sin embargo, adquirieren una importancia central dentro del foro, agrupando comunicaciones y generando debate y reflexión en torno a ellos (…). La explicación a esas desviaciones en las contingencias y reciprocidades comunicativas en el ciberespacio (…) no es resuelta adecuadamente en las [actuales] investigaciones de corte etnográfico, lo que lleva a buscar otros enfoques complementarios que permitan enriquecer el estudio pedagógico de las comunidades virtuales. El análisis de redes sociales (ARS) está en condiciones de rellenar esa clase de lagunas. Fuera de los razonamientos positivistas, los métodos estructurales y de ARS permiten explicar en términos relacionales el peso de un mensaje dentro de la red de comunicación establecida en un foro virtual”. Pues eso, el ARS otorga una nueva ruta para entender la interacción.

1 comentario:

Anónimo dijo...

De verdad que si, inclusive todo se da por internet ahora, venta de viagra online, juegos, socializar,etc etc y esto ya no abra forma de pararlo si se muriera el internet el mundo volveria a la edad de piedra.
Buen post.